Pues resulta que he tratado este blog como si fuera mi distrito y yo senadora federal después de seis meses de pasadas las elecciones. ¿Qué les puedo decir? Ha sido un semestre algo ajetreado. Ando tesiando(yo misma me doy sic), dando clases y cultivando canas de rápido crecimiento.
Los alugnos andan desatados. Creo que los adolescentes tienen una capacidad mágico-misteriosa-musical de sentir cuando la primavera se encuentra rondando la esquina. Por lo pronto tengo varias parejitas que de plano tengo que rociarles agua para que se separen los cachondos impropios. Pero por lo pronto, no ha habido ningún embarazo adolescente, ni enfermedades venéreas en los grupos así que ¡yay! eso es ganancia.
Estoy avéntandome la friega de enseñarles a argumentar de manera lógica y siento como si estuviera pagando por adelantado los pecados de mis bisnietos no natos. Es emocionante verlos sudar para tratar de explicar el porqué de sus opiniones, el darse cuenta por primera vez que no es suficiente repetir ignorancias una y otra vez para convertirlas en argumentos válidos y el pensar antes de hablar (tipo Homero... mmmm donas). Aún tengo unos cuantos rejegos que no se dejan, pero han habido momentos inspiradores, de esos que tienen soundrack propio. Es un trabajo difícil pero .... deberían pagarme más.
También hubo junta con los padres de familia. Es interesante ver la genética en acción y cotejar personalidades, sueños, frustraciones, esperanzas. A veces es curioso ver cómo los papás tienen un concepto totalmente diferente de cómo es el querubín y sus aspiraciones ("X sacaba muy buenas calificaciones en primaria, maestra, no entiendo cómo es posible que ahora no quiera estudiar como antes.", "¿Usted sabe quién es X? Es que el fulanito no deja de hablarle a mi hija y ella nos dice que no lo conoce, pero estamos preocupados", etcétera) Me da pena ajena hasta cierto punto porque revelar cosas implica en mi sensible cabecita el traicionar a mis educandos. Aunque en realidad, es una cuestión de ética: tengo que informar lo que es pertinente al desempeño académico. Y no reirme cuando me dicen cosas como que no importa que cierta alumna quiera estudiar cosas no difíciles porque su meta es casarse y por lo tanto no se preocupan los papás. O que regañe a un alumno por su tipo de letra y lo presione a hacer planas. WTF.
En fin, mis grupos (dos, nomás) son muy diferentes y ambos disfrutables: uno es formal y atento, pero no se emociona con las cosas que vemos y el otro es el caótico, pero entregado, aunque muy relajiento a veces. En uno apuntan lo que digo, en otro dicen "¡cuera!" cuando hago un comentario sarcástico. La verdad no entiendo lo que pasa porque sigo siendo la misma en los dos grupos. A lo mejor mis feromonas funcionan más con el segundo, porque en el segundo me dicen la Miss Estelita y el otro Maestra Estela.
Y de la tesis, me siento renuente. Tengo muchas ideas que quiero agregar y les doy vueltas en mi cabeza pero siento terror ante la pantalla de word. Nomás no sale nada de mis dedos que se mueren por tecleyear (copyright Piporro) y dejar salir este torrente verborreico de curvas circunflexas. Ironía, te ríes en mi cara y apagas el cigarro en mi ojo: para el blog traigo mucha inspiración, para la tesis sólo se oye el cantar de los grillos.
En fin, me separo para poder darle a lo que me truje Chencha.
Un abrazote y disculpas por la tardanza.
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